El ProgresoSitio Arqueológico de Guaytán Fotografía y textos por José Mata Regresar a página principal: Rutas Síguenos en Facebook para estar actualizado Guaytán es un sitio maya que vale la pena conocer y muy fácil de llegar al mismo. Se toma la carretera al Atlántico (CA-9) y a la altura del Km. 90 está el cruce a mano izquierda, si se viene de la ciudad de Guatemala; cosa rara hay una señal que nos indica el cruce: Guaytán. Avanzamos un par de kilómetros en buena terracería y listos, ya estamos. La importancia del lugar, aparte de ser un paraje muy agradable para caminar, estriba en que la ciudad de Guaytán define una región donde se encontraron y explotaron las vetas de piedra verde (término más común que abarca a la Jadeíta, el Jade, entre otras). El Jade fue la joya por excelencia de los mayas y parece ser que desde está región se abasteció a todo el mundo de Mesoamérica que demandaba esta piedra preciosa, tanto para fines suntuarios, religiosos como de índole prácticos.
Don Julio Macal (arriba) ha estado en este sitio de Guaytan por mas de 15 años y él, o sino su compañero Héctor, siempre están bien dispuestos para atender a las turistas visitantes. Don Julio con mucho entusiasmo y orgullo nos acompañó mostrándonos paso a paso los diferente lugares del sitio. Para empezar, nos enseñó el modesto museo donde él tiene sus oficinas. Por cierto que da mucha pena como un Ministerio, como lo es el de Cultura, puede tener un museo o Garita del sitio en tan paupérrimas condiciones. La foto es elocuente para mostramos el entusiasmo de Don Julio y el museo de tan triste figura a sus espaldas. Para obtener más información técnica y general de Guaytán y la región ver la Tésis de Pamela Francisca López Porras, al obtener el grado de arquitecta en la USAC.
Esta foto nos permite distinguir en el último plano el mencionado mirador oriental, Magdalena. La toma está lograda cuando se viene descendiendo de la colina del poniente. Observe el marcado contraste entre dos coloridos de vegetación que se nos presentan: el del primer plano corresponde al bosque Chaparral Espinoso y el del segundo, frente a la colina Magdalena, al llamado bosque Ripario. La razón de estos dos biomas se da porque muy cerca de Guaytán pasa un río, el llamado río Lato o Hato, que fue incluso fuente de suministro de las piedras verdes que arrancaba a las canteras de la Sierra de Las Minas en sus crecidas.
Ahora estamos adentro del bosque que forman las orillas el río Lato (Hato o Jato), ya no son árboles pequeños y plantas espinosas, son árboles grandes y frondosos que contrastan fuertemente con el bioma del Chaparral Espinoso donde esta el sitio arqueológico. Este bosque que lo distinguimos muy bien desde la acrópolis de Guaytán hoy en día recibe el nombre de La Vega. En el bosque se dan muchos árboles frutales tales como El Chico, Mango, Maguey, Caimitos, etc. Vale la pena visitarlo y así disfrutar de un oasis natural de frescura. La Acrópolis es caliente y es recomendable visitarla a primeras horas o ultimas del día. Para pasar las horas picos del extenuante calor lo recomendable es La Vega; ahí hay incluso un pequeño turicentro donde el viajero puede aplacar la sed, descansar en hamacas a la sombra del bosque y si así fuera su gana darse un chapuzón, pues cuenta con piscina. También brinda el turicentro unos cuantos cuartos para el que desee pernoctar una o varias noches.
La foto de arriba, tomada desde la cumbre de la atalaya orientada al poniente, nos muestra (encerrada en un círculo) la parte de Guaytán que corresponde a la Acropolis, que como se aprecia es una pequeña colina. Al pie de la acrópolis de guaytán tenemos La Vega que es el bosque Ripario ya mencionado y en primer plano apreciamos con marcado cambio de colorido, debido a los distintos tipos de vegetación, el bosque Chaparral Espinoso de la colina. En el extremo superior izquierdo se deja ver un pequeño resquicio del río Lato.
Aprovechando la visita a Guaytán vale la pena reservar un poco de tiempo para conocer San Agustín Acasaguastlán que está a un par de kilómetros del sitio arqueológico. En San Agustín destaca la iglesia colonial, la cual debajo de su nave principal cuenta con algunas catacumbas que en ciertas ocasiones están abiertas al público para ser visitadas. Además son de especial interés los retablos e imágenes religiosas coloniales que alberga la iglesia. Recordemos que San Agustín Acasaguastlán fue parte del llamado, en la época colonial, corregimiento de Acasaguastlán que estaba en el camino Real que conducía al Golfo o Costa Atlántica. Regresar a página principal: Rutas Síguenos en Facebook para estar actualizado
Comentarios
No hay comentarios publicados.
Cargando...
|